Este año la asociación barcelonesa Sonríe y Crece ha cumplido su décimo aniversario, y en el marco de esta celebración nos han hecho llegar la siguiente carta. "Es, nos dicen, una carta de agradecimiento de diez generaciones de jóvenes de Sonríe y Crece a la Comunidad de San Pablo, y en especial a todos sus miembros que han pasado por la República Dominicana".
Con curiosidad e ilusión por poner lo aprendido al servicio de una sociedad necesitada, y en especial a sus niños y niñas, un pequeño grupo de jóvenes universitarios barceloneses se trasladó hasta Sabana Yegua en el verano de 2009. Acudían en respuesta a la invitación de la Comunidad de San Pablo, establecida en el pueblo desde hacía varios años.
Empezaron por jugar, y utilizaron los juegos como herramienta imprescindible para comunicarse con los niños y niñas. A través de actividades lúdicas promovían aspectos simples del día a día a cientos de niños y niñas: compartir, esforzarse, trabajar unidos, respetar.
Conscientes de la energía que requería esta labor, y decididos a convertirla en un proyecto sostenible que los chicos y chicas locales pudieran liderar, crearon una asociación de jóvenes, Sonríe y Crece.
Año tras año, nuevos jóvenes universitarios se unen a la tarea de Sonríe y Crece. Hoy ya son diez generaciones, y más de tres proyectos base en los que se promueve la educación, la salud y el medio ambiente en varios pueblos de la región de Azua, al sureste de la República Dominicana.
La Comunidad de San Pablo ha estado presente durante todo este proceso. Su espíritu de acogida y dedicación han sido nuestras raíces en Sabana Yegua. Con su conocimiento nos han guiado, y también nos han dado el espacio para crear y madurar nuestros proyectos. El ejemplo de amor de la Comunidad de San Pablo nos ha ayudado a crecer, tanto a los miembros de Sonríe y Crece como a los cientos de niños y niñas dominicanos que han pasado y continúan pasando por nuestros juegos.
Esta es una carta de compromiso y amistad. Aunque las generaciones de jóvenes que se unen a Sonríe y Crece vayan sucediéndose año tras año, seguimos unidos por un objetivo común.